Dentro de la planta de cannabis, conviven dos principios activos muy diferentes entre sí:

1. CBD: también conocido como cannabidiol. No produce efectos psicotrópicos, es decir, no "coloca", y tampoco resulta adictivo. Además, ofrece multitud de beneficios para la salud. Todas estas razones convierten al CBD en una sustancia segura y legal, utilizada tanto de forma recreativa como complemento terapéutico (si quieres saber más sobre qué es el CBD en este post te lo explicamos con detalle).
2. THC: por otro lado tenemos el tetrahidrocannabinol, el elemento psicoactivo del cannabis. Con esta sustancia ocurre justo lo contrario al CBD, ya que es la culpable del "viaje" producido por la marihuana normal y, además, resulta adictiva.

De esta manera, cuando hablamos de marihuana CBD nos referimos a un tipo de cannabis sin efectos psicotrópicos y que no provoca adicción.

Sin embargo, esta marihuana sí cuenta con una serie de efectos beneficiosos entre los que destacan:

• Antiinflamatorios: ayuda a bajar la hinchazón de las zonas inflamadas del cuerpo, un síntoma muy común en enfermedades o fuertes golpes.
• Ansiolíticos: calma y atenúa la sensación de ansiedad, pero sin llegar a aturdir o adormecer como sí ocurre con el THC.
• Antioxidantes: favorece al proceso de regeneración de las células y ralentiza su oxidación (de ahí que el aceite CBD sea un producto tan demandado por aquellos que quieren cuidar su piel).
• Neuroprotección: al proteger las células, también se cuida el tejido neuronal procurando que no se degenere (justo al contrario que el THC que ataca y daña las neuronas), es por esta razón que el CBD cada vez se usa más en tratamientos para el Alzheimer, la esclerosis múltiple o la enfermedad de Parkinson.
• Analgésicos: alivian el dolor y la contracción muscular, por eso se utilizan como apoyo para paliar el malestar en pacientes con quimioterapia o terapias similares.

Como ves, los efectos de la marihuana CBD son beneficiosos y positivos (si también quieres conocer sus propiedades naturales, te aconsejamos leer este otro post), por lo que se ha convertido en un apoyo complementario muy común en terapias y tratamientos clínicos.