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La diabetes es una de las enfermedades no contagiosas más extendidas en todo el mundo.
Solo en España, afecta a casi 6 millones de personas.
Y al contrario de lo que mucha gente piensa, tener diabetes no solo implica tener que controlar el azúcar que ingieres. Además, es una enfermedad que genera muchos problemas e incomodidades a quienes la padecen.
Si es tu caso o el de alguna persona cercana, y buscas alguna opción más allá de los fármacos tradicionales para paliar sus síntomas, es posible que hayas oído hablar sobre el CBD y sus propiedades.
Ahora bien, ¿qué dicen los estudios sobre el uso del cannabidiol en pacientes diabéticos?
En este artículo te lo explicamos en detalle.
➡️ ¿Qué relación hay entre el CBD y la diabetes?
Empecemos por lo básico.
Como sabrás, la diabetes es una enfermedad muy relacionada con la insulina, una hormona que produce nuestro páncreas para regular la cantidad de glucosa (azúcar) en la sangre.
El papel de la insulina es convertir el azúcar que entra en nuestro cuerpo en energía.
Dicho esto, existen dos tipos principales de diabetes, y ambas afectan a esta hormona de una manera diferente:
- Diabetes tipo 1: en este caso, el cuerpo no produce suficiente cantidad de insulina, por lo que los pacientes deben inyectarse esta hormona diariamente (puede afectar tanto a niños como a adultos jóvenes).
- Diabetes tipo 2: aquí el organismo sí produce insulina, pero el cuerpo no reacciona de manera adecuada a esta (lo que se conoce como "resistencia a la insulina"). Es el tipo más común y afecta mayoritariamente a adultos.
En ambos casos, la consecuencia es que las concentraciones de glucosa en la sangre se elevan y el cuerpo no puede utilizar este azúcar como combustible.
Todo esto acarrea consecuencias graves, como por ejemplo:
- Trastornos metabólicos.
- Problemas renales.
- Dolor intenso (sobre todo en las articulaciones).
- Problemas oculares (incluso ceguera).
- Enfermedades cardiovasculares.
- Etc.
Ahora bien, ¿cómo puede influir la marihuana en todo este embrollo metabólico?
✅ El sistema endocannabinoide y la diabetes
Muchas de las funciones fisiológicas del cuerpo (entre ellas, la respuesta y la sensibilidad a la insulina) están reguladas por un sistema llamado “sistema endocannabinoide”.
Este sistema funciona como un canal de comunicación entre las células, utilizando sustancias que produce el propio organismo: los cannabinoides.
A su vez, estas sustancias se parecen mucho a las que podemos encontrar dentro de la planta de marihuana, que produce “fitocannabinoides”. Estas sustancias vegetales son capaces de conectarse a los receptores del sistema endocannabinoide humano, y pueden ayudar a regular las señales que envía.
Entre estas sustancias fitocannabinoides, una de las más conocidas y que, además, se caracteriza por sus efectos terapéuticos, es el cannabidiol o CBD.
➡️ Usos del CBD en aceite para la diabetes
En los últimos tiempos, se han explorado distintas aplicaciones del CBD para la diabetes, en particular en formato de aceite.
Y es que el CBD en aceite es más fácil de dosificar, con lo que se hace más sencillo llevar un tratamiento terapéutico controlado. Además, es bastante fácil de fabricar (aquí puedes ver un artículo sobre cómo hacer aceite de CBD en casa).
Si bien todavía hacen falta más estudios clínicos realizados en seres humanos para medir el efecto directo del CBD en la diabetes y sus síntomas, estos son algunos de los posibles beneficios que se han descubierto a día de hoy:
✅ 1. Estabilización de los niveles de glucosa y secreción de insulina
En primer lugar, se está analizando cómo influye el CBD en la sensibilidad o resistencia a la insulina.
Este estudio realizado en los Estados Unidos midió el nivel de insulina en ayunas de 4657 personas y constató que las que habían utilizado marihuana tenían un nivel de insulina un 16 % más bajo. Además, también mostraron un índice de resistencia a la insulina un 17 % más bajo.
Esto quiere decir que el CBD puede ayudar a que la insulina vuelva a cumplir su función normal y así se podrían normalizar los niveles de azúcar en la sangre.
✅ 2. Reducción de la inflamación del páncreas y del dolor
La diabetes es una enfermedad que, entre otros síntomas, causa inflamación en varias partes del cuerpo, incluido el páncreas (órgano encargado de producir la insulina).
Y cuanto mayor es la inflamación crónica del páncreas, mayor es la resistencia a la insulina y más cantidad de esta hormona tiene que producir.
Es un círculo vicioso muy nocivo: a más se inflama el páncreas, más tiene que trabajar, y a más trabaja, más se inflama.
Como una de las propiedades del CBD más destacadas es su potencial antiinflamatorio, se está explorando también su uso como una forma de romper este ciclo.
Así, este estudio indica que el CBD puede inhibir y retrasar la respuesta inflamatoria en ratones, lo que resulta en una disminución de la incidencia de diabetes.
Por otro lado, el control de la inflamación en otras partes del cuerpo disminuye significativamente el dolor que experimentan los pacientes con diabetes avanzada (aquí puedes ver más sobre las propiedades del CBD para el dolor).
Incluso se está valorando el uso del cannabidiol para reducir los efectos de la diabetes en el cerebro y el sistema nervioso. Por ejemplo, este estudio realizado en Brasil en ratas diabéticas logró conseguir niveles reducidos de marcadores de inflamación en el hipocampo.
✅ 3. Control del peso y la obesidad
Otro de los factores que más contribuyen al desarrollo de la diabetes es la obesidad.
Aquí es donde entra en juego de nuevo el sistema endocannabinoide, ya que este está también relacionado con la función del hambre (específicamente el receptor CB1).
Es por eso que se ha estudiado también la influencia del CBD en este aspecto, ya que es capaz de influir en el sistema endocannabinoide y regularizar las hormonas asociadas al hambre.
Con ello, podría ejercerse un mejor control sobre la ganancia descontrolada de peso.
✅ 4. Protección del hígado
Cuando la insulina no cumple su función y los niveles de azúcar en sangre aumentan, el hígado empieza a trabajar para convertir este exceso de azúcar en grasa (que es mucho más fácil de almacenar para el cuerpo).
Este mecanismo evita que ese exceso de azúcar en sangre nos dañe. Sin embargo, a largo plazo perjudica al hígado, que empieza a aumentar de tamaño a medida que se forman depósitos de grasa.
Es lo que se conoce como “hígado graso”.
Cuando llega a este punto, el sistema endocannabinoide intenta mantener el órgano en equilibrio, pero al hiperactivarlo, en realidad empeora el problema.
Es ahí en donde el CBD juega un papel importante, ya que es capaz de modular y regular el sistema endocannabinoide, protegiendo así al hígado de más daños.
➡️ ¿Has tenido alguna experiencia con CBD y diabetes?
Como has visto, aunque aún escasean estudios del CBD en humanos, ya podemos empezar a vislumbrar los numerosos beneficios que podría tener el uso del CBD en pacientes diabéticos.
Aun así, no está de más recordarte que consultes siempre con un profesional de la salud antes de recurrir a cualquier tratamiento por tu cuenta.
Si ya tienes en claro que quieres utilizar CBD, ¡asegúrate de adquirir productos de calidad certificada! Como el aceite de CBD que podrás encontrar en nuestro catálogo.
Si te ha quedado alguna duda, puedes dejarla aquí abajo en los comentarios. Nos encantará ayudarte.
Be CBD, my friend.
Bibliografía y estudios científicos relacionados
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